
El jueves en la tarde,

Viernes en la mañana había que estar listos, había que ir al café de la noche anterior por todo el equipo y trasladarlo al nuevo bar... Esperamos, esperamos y esperamos. Comimos, paseamos, nos hartamos y nos quedamos esperando. Una cancelación de último momento hizo que nuestras venas de la frente saltaran de coraje, justo a esa hora llegaba la segunda tanda de gente, la otra parte de la banda que faltaba. Había que hacer dos cosas en ese momento, mantenernos juntos, y buscar otro lugar para tocar (tratando de conservar la calma). En eso el guacamares vuelter salvó la noche de todos al decirnos que había conseguido espacio para que todos tocaramos en el Antik, de nuevo. Muy felices y con las venas de la frente un poco más relajadas, nos fuimos de regreso al café, a empezar a montar todo... La mejor parte por supuesto era que no tendríamos que transportar nada del equipo.
Los primeros en tocar fueron Luzvela! - www.myspace.com/luzvela - Qué diferencia de show al último que me tocó ver. Más calidad musical, mejor presencia, buenas rolas. Prendieron chingoun, y la gente fue entrando. Nosotros como siempre, ahi...
Después le tocó el turno a los Estereox - www.myspace.com/estereox - siempre prenden, y lo siento, soy fan...
Le siguió Feel - www.myspace.com/feelmx -

Al final el lugar estaba bastante poblado

El sábado fue el peor día... Después de la excelente noche del viernes (la cual nos amaneció a todos), teníamos que estar temprano en una de las plazas de la ciudad, donde al parecer tocaríamos las tres bandas de nuevo... Eso jamás sucedió, así que de malas, hambrientos, crudos y cansados nos dedicamos a perder el tiempo de la mejor manera posible. Nos acompañaron las chelas de nuevo, pero pocas, solo para pasar los cacahuates... En la noche nos fuimos a otro bar en donde tocarían de nuevo los Estereox. En el soundcheck empezaron las bajas... De plano nos aturdía un cansancio pesado, y la vibra era extraña. Y a pesar del cansancio, la cruda, el mini escenario (de donde estuvieron a punto de caerse la batería y los sintes) y un gordo super borracho malacopa (que se le hacía gracioso pisar los pedales del guitarro y hacerle coros), el toquín fue muy bueno, como siempre.
Sólo hubo una baja total, que después de todo el toquín se despertó gracias a una buena zarandeada propinada por una dulce señorita conocida como la roja. Y ahora lo peor seguía, regresar todo el equipo a los vehículos que, aunque estaban en el estacionamiento más cercano, no era suficiente. Cuatro vueltas cargando instrumentos por calles empedradas fueron necesarias.

Buena noche, excelente mañana; llena de viento, contagiada de paz... si de este cansancio trata la vida, quiero cansarme mucho más!