Otro 27 de septiembre, otro más que no estás aquí con nosotros mamita. Y sigue doliendo, mucho, todos los días pienso en ti, pero ya no me pongo triste, tengo muchas cosas por las cuales ser feliz. Tengo un esposo grandioso, que me ama, y que lo amo, que me hace reir, y que me gusta su barba ˆ–ˆ tengo un bebé divino, que me vuelve loca de amor con cada cosa que dice y hace, tengo otro bebé creciendo en mi pancita, que vaya que si me va a crecer la pancita esta vez.
Tengo además una familia maravillosa, mi papá y mi hermana que no importa que estemos lejos siempre nos decimos buenos días, (buenos días alegría, como tu decías). Mis tíos y primos que siempre estamos en contacto, igual, dándonos los buenos días y apoyándonos. Mi familia política que también son a todo dar, y nos han apoyado siempre en todo.
Pero el punto es que tu no estás aquí, no físicamente, y sí te extraño, siempre mamichi, siempre. Pero te veo y te siento en mi, en cada cosa que hago igual que tu, como me lavo los dientes, como tomo mi agua por la noche, como me acuesto a ver la tele, y como a veces se me antoja ver películas mexicanas en blanco y negro. Aunque te siento todos los días cómo me gustaría que estuvieras aquí, aunque sea que pudiera verte una vez al año, en tu cumpleaños, cantarte las mañanitas, brincarte encima en la cama, aplastarte y abrazarte y besuquearte, ponerte el huapango de Moncayo o hasta tu música religiosa que tanto te gustaba, hacerte un cafecito con dos galletas y convencerte de que te fuéramos a comprar algo de regalo para tu cumple, aunque "no lo necesites".
Me encantaría que pudieras jugar con mi hijo, cantarle tooodas las canciones de toooodo lo que pide, porque seguro tu le inventarías todas las canciones que te pidiera, así como me las pide a mi... "canshón tortor", "canshón cocoilo", "canshón botot" y de verdad que te morirías de risa de todo lo que dice, se que lo amas y lo cuidas desde allá pero yo te quiero aquí.
Cada día que pasa te entiendo un poco más, y pienso que fui muy dura contigo y lo siento mucho, mucho mamichi, pero bueno, yo que iba a saber, yo era una tonta adolescente, y luego fui una tonta adulta que no entendía muchas cosas... hasta ahora las voy entendiendo...
También ahora entiendo por qué a veces te quedabas dormida viendo la tele, por qué a veces estabas tan cansada, pues cómo no, si te la vivías haciendo cosas por todos, llevándonos a todos lados, y cuidando a todos, grandes y chicos, a todos tus sobrinos que tratabas como hijos, a tu mamá, a tu papá, a tus hermanas...
Se que se puede vivir sin ti, lo sé, pero cómo me gustaría que no tuviera que hacerlo.
Te extraño cada día mamichichi, feliz cumpleaños, donde quiera que estés. Te amo!
1 comentario:
te leo y me dan ganas de llorar.... tqm y felicidades por tu hijo de afuera y tu hija de adentro felicidades
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