martes, noviembre 25, 2014

... 3 meses ...

Ya pasaron 3 meses de que llegó Bruno al mundo, y cada día ha sido de aprendizaje, a veces arduo y a veces fácil. La doctora dice que todo va bien, sube de peso y crece bastante bien.

Semanalmente recibo información del desarrollo que va a lograr en esa semana, y parece magia, tal cual lo que me va llegando, lo empieza a hacer o ha empezado un par de días antes. 
En este tercer mes, ya usa más sus manitas, las ve, y empieza a intentar tomar objetos con ellas, (mi cabello es víctima del buen agarre que tiene) hoy por ejemplo, tomó por primera vez la sonaja, y la tuvo un buen rato en su manita. Otro avance es que ya tiene más fuerza en su cuellito y espalda, sigue odiando que lo ponga boca abajo, (ya se me cayó de sillón por primera vez estando así, no pasó a mayores pero lo sufrí horrible), pero ya se levanta mejor, ahora jugamos de frente, le agarro sus manitas y lo subo y él solito se impulsa, y le encanta ese juego; pero no aguanta mucho rato de jugar así porque, ahora, odia estar acostado por mucho tiempo. Sólo puede estar en intervalos cortos acostado, porque ya quiere estar parado todo el tiempo (bueno, obvio cargado), le encanta ver todo lo que hay, le gusta ver el espejo aunque todavía no sepa qué es, le fascina bailar el vals, le canto generalmente “Danubio Azul”, esa parte de “queremos pastel, pastel, pastel” jajaja y otras veces “Sobre las olas"… de hecho es lo único que lo calma cuando se empieza a desesperar.

Ya ríe mucho más, aunque apenas ha soltado un solo gritito de felicidad y fue con su papá, porque aparentemente su mamá no le hace tanta gracia, sólo cuando le doy ataque de besos, ahí si le hago gracia, gracia muda, pero gracia al fin. 

Hace dos días lo empezamos a bañar en regadera, y parece que sí le gusta, pero está tan agusto en la regadera, que a la hora de vestirlo ha soltado unos berridos espantosos, así que hay que cambiar la estrategia del vestido… Una vez bañado, vestido y perrrjumado, se dispone a cenar con Norah Jones de fondo, que parece ser un arma infalible; después de un rato, termino con su canción de cuna (“No hay que dormir” de Mary Poppins, aunque yo le cambié a “Hay que dormir” porque mi cabeza cree que hay que mandar el mensaje positivo jaja). Ya empieza a dormir un poco más en la noche, aun no es todas las noches, ni toda la noche, pero algo es algo… 

El logro más grande que he tenido este mes es que ya no toma nada de fórmula, y si, tengo que estar todo el día pegada, pero lo logré, con un poco de paciencia y determinación!

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