El 15 de enero asistimos a la boda de nuestros grandes grandes amigos Bucli y Yafid.
Fue una boda muy esperada ya que se les atravesó la pandemia y tuvieron que aplazarla.
Debo confesar que tenía muchísimas dudas de ir, pero era más grande mi emoción por verlos por fin casarse. Ellos se aman muchísimo y son súper felices juntos, se nota, siempre.
Memo y yo pensamos muchas cosas, mis hijos se enfermaron e incluso ya estaba yo pensando en no ir a la boda, imagínate cancelar 3 días antes porque tus hijos están enfermos y no sabes si es covid… así es, traían una gripa-tos medio feita, pero eso sí, nunca tuvieron fiebre y era lo único que me medio relajaba… así que decidimos hacerle una prueba a mi hijo y salió negativa… sentí como si me quitaran un costal de encima… y bueno, además una amiga pediatra nos ayudó a llevarlos en su tratamiento y todo salió muy bien!
Pero mi estrés no es de a gratis amigos, no. Yo viví con una mamá aprehensiva, miedosa de que algo nos pasara, preocupona y muy cuidadosa de sus hijas. Pero eso amigos, tampoco era de a gratis. Cuando mi mamá era chica, una de sus hermanas más chicas se enfermó, muy fuerte. Le dio meningitis causada por cisticercos. Así que en esa casa nunca se comía carne de cerdo, ni fresas, ni lechuga. Cuando íbamos a mcdonalds mi mamá siempre pedía nuestras hamburguesas sin lechuga, y ni pensar de pedir una ensalada en un restaurante… es más la primera vez que probé los tacos al pastor fue a los 14 años en una fiesta de XV de la hermana de una amiga, me acuerdo perfecto, me sentía súper rebelde y pensaba que me iban a meter el cague de la vida… además, mi mamá perdió dos bebés entre mi hermana y yo, y cuando se embarazó de mi, tuvo que estar 9 meses en cama por amenaza de aborto, así es amigos, casi ni nazco… pero sí nací, y me hice como hipocondríaca, como que me platicaban de que se habían enfermado y yo ya juraba que tenía los mismos síntomas O_o
A eso súmenle que desde que me embaracé desarrollé una angustia por tratar de hacer todo bien como persona responsable de una vida que no es la suya y que depende completa y absolutamente de ti… y encima, desde que nació mi hijo, algo en mi se desató, un temor horrible de que algo les pase, y peor aún cuando a sus dos mesesitos le dio una tos horrible, así de nebulizar y todo… y que a partir de ahí, cada dos meses se me enfermaba de tos y de tos y de tos… y a pesar de que en estos dos años de pandemia, solo se enfermaron una vez justo antes de navidad el año pasado, apenas oigo a mi hijo toser y se me activa el chip, se me ponen los nervios de punta, mi cabeza empieza a pensar mil cosas al mismo tiempo, se revoluciona, es horrible…
Pues total, que con la prueba negativa, decidimos ir a la boda. Ahora seguía lo más difícil, relajarme y pasarla bien… eso amigos, sí que lo veía difícil…
Platiqué con memo de cómo haríamos esto. Yo quería ir con cubrebocas todo el tiempo, memo me decía que si ya íbamos a ir a la boda pues que lo haríamos bien, iríamos a pasarla bien y festejar a nuestros amigos… llevamos 2 años cuidándonos y esta sería la primera ocasión en la que realmente nos expondríamos a mucha gente así, sin cubrebocas… a rais… jajaja
Hablé con varias personas para tantear el terreno, y decidí que yo sí usaría mi cubrebocas todo el tiempo, aunque fuera por paz mental, era la única manera en la que yo podría disfrutar realmente, porque la verdad es que sí, mi angelito me dice que me cuide y mi diablito dice que ya, que ya es hora de salir, de relajarme, que el mundo está aprendiendo a vivir con esto y que así tendremos que seguir viviendo…
Estaba muy nerviosa, así que traté de arreglarme súper bonita, me peiné, me puse guapota, hasta me bañé ^_^ En dos años no me había arreglado así, pensé pues que valga la pena!!
Me puse el vestido, me puse chanclita (porque cuando me probé mis tacones, nomás de probarlos ya me andaba doliendo la espalda) agarré mi ukulele, mi esposo y mi view master.
Llegamos y ya todo estaba a punto de empezar, los novios se veían que echaban tiros, el muy guapo y ella hermosa. La ceremonia estuvo súper bonita, medio mundo llorando, muuucho amor en el ambiente, y yo temblando de nervios, mi amiga quiso cantarle de sorpresa a su nuevo esposo, y yo sería la que tocaría la canción. Lo logré, pero me puse tan nerviosa que me saqué como un 8, ella un 10! Bravo!!
Nos dieron mil y un regalitos, comimos delicioso, hubo montones de detalles lindos durante todo el día, en serio, estos dos viven para regalar a los demás, para demostrar su cariño a las personas que los quieren, siempre, de todas las maneras posibles, te hacen sentir en casa, acogido y querido. La música estuvo buenísima, el clima perfecto! Y ya ven que soy como un trompo y en las bodas me encanta estar bailando tooodo el tiempo, y esta vez no fue la excepción. Me puse mis tennis, y desde que me paré a bailar, me senté solo 3 veces, 2 a descansar y la última a cenar taquitos… bailé y rapeé y cumbié y rocanroleé y lacalledelassireneé, y bebí palomas y mucha agua porque qué sed me daba, y fui muy muy muuuy feliz. Por fin estaba sacando todo eso que llevaba guardado casi dos años! Es más, ni una vela voladora que se rompió encima de mi me detuvo jaja.
La verdad es que sí lo necesitaba, necesitaba callar mis voces, ir y disfrutar, pasarla bien y solo pensar en mi siguiente paso de baile, y no estar pensando en la comida, los platos, la tarea, el bicho, que si esto, que si lo otro…
Bucli y Yafid, gracias por compartir esto con nosotros, que terminó siendo además de una hermosísima boda, un desahogo, un respiro.
Les deseo todo el amor que dan a los demás pero para ustedes, pa que sientan qué bonito se siente y pa que sean más felices de lo que ya son.
